Según Pierre Levy, cibercultura es “el conjunto de técnicas, de maneras de hacer, de maneras de ser, de valores, de representaciones que están relacionadas con la extensión del Ciberespacio”. Este termino lo defino como un proceso de cultururizacion a traves e la red, la computdora como un instrumento para la socializacion y comunicación, el aprendizaj, el entretenimiento y el e-comerce.
Algunos autores como Kerckhove y Lévy, definen la cibercultura como la tercera era de la comunicación, en la que se habría configurado un lenguaje todavía más universal que el alfabeto: el lenguaje digital. Una era que habría seguido a las de la oralidad y la escritura. Kerkchove, además, propone comprender la cibercultura desde tres grandes características: la interactividad, la hipertextualidad y la conectividad (Inteligencias en conexión. Hacia una sociedad de la web).
Las implicaciones de la cibercultura no afectan únicamente a la idea de sujeto, la identidad o las relaciones sociales, sino que van más allá. Si tenemos en cuenta que capacidades tales como la creatividad científica o artística no pueden ser aisladas del contexto cultural y social que las rodea, y nuestro contexto actual es el de la cibercultura, resulta lógico que la ciencia y el arte se vean afectados por este cambio de paradigma cultural, acercándose cada vez más, un campo al otro, mediante el empleo de la tecnología.
De este modo, en la era de la Cibercultura, el sujeto que se crea constantemente siguiendo la estética de la existencia, el arte que ha dejado de ser estático para ser interactivo o el Net.Art, en el que obras surgen y desaparecen en la fluctuabilidad de la red, existen y se alimentan de la interactividad.
La creatividad que las nuevas tecnologías nos permiten desarrollar, tanto para construirnos a nosotros mismos, como para crear las más asombrosas obras de arte, es la más cercana a la naturaleza del ser humano que ha vivido la humanidad, en tanto que recoge dos de las características más esenciales del ser humano: que es un ser sociable (con una necesidad permanente de interacción) y que es siempre un ser inacabado en constante construcción, un “animal no fijado”, como lo definía Nietzsche, indefinido e indeterminado, que carece de una identidad definitiva o cerrada a la que poder aferrarse. Condenado a la constante interpretación de sí mismo: un hombre que se construye en tanto que se interpreta.
http://www.javeriana.edu.co/relato_digital/r_digital/cibercultura/cibercultura.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Cibercultura
http://www.cibersociedad.net/recursos/art_div.php?id=298
1 comentarios:
Jajajjaaj!!! la nueva forma de hacer las cosas, que tal la viejita :)
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